Un médico advierte sobre el peligro de una sobredosis de los medicamentos para el dolor. En algunos casos el daño es tan severo que el paciente es candidato al trasplante de hígado.
Tomar demasiado paracetamol puede ser fatal. La droga produce una sobredosis difícil de detectar a tiempo para evitar la muerte. Esta advertencia fue hecha en un estudio reciente publicado en "British Journal of Clinical Pharmacology" por el Dr. Kenneth Simpson.
Profesor de la Universidad de Edimburgo y director del equipo de trasplante de hígado del hospital universitario, Simpson advierte que las sobredosis suelen ocurrir a menudo cuando las personas sienten dolor y toman repetidas dosis de paracetamol para aliviar los síntomas.
Los pacientes que presentan sobredosis de paracetamol son aquellos que tomaron el medicamento repetidas veces, pensando que una dosis más alta podría matar el dolor. El resultado es la acumulación del fármaco en la sangre, dando lugar a la insuficiencia hepática - evalúa el médico.
El Dr. Simpson y su equipo analizaron datos de 663 pacientes que habían sido atendidos en el Hospital Real de Edimburgo entre 1992 y 2008, con daños en el hígado. Ellos descubrieron que 161 pacientes habían tomado demasiadas dosis de paracetamol, en un período relativamente corto, por lo general para aliviar una variedad de dolores comunes, como los abdominales o musculares, cefalea y dolor de muelas.
Al llegar al hospital, estos pacientes presentaban síntomas de sobredosis y estaban propensos a tener problemas en el hígado y en el cerebro. Ellos requerían diálisis renal inmediata o necesitaban ayuda para respirar. O sea, tenían más probabilidades de morir que las personas que tomaron una sola dosis grande - dice Simpson.
Él dice que las dosis repetidas se acumulan en el organismo y que estos pacientes deben ser monitoreados de cerca. El examen para medir el nivel de paracetamol en la sangre es esencial para que haya una evaluación médica capaz de detener la reacción en cadena que conduce a la insuficiencia hepática.
Y advierte que muchos mueren por falta de un diagnóstico preciso o de atención médica adecuada, ya que la sobredosis de la droga es difícil de diagnosticar. En algunos casos el daño es tan severo que el paciente entra a la cola de trasplante de hígado.
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