(NC&T) La investigación, llevada a cabo por el equipo de Fernando Galembeck, de la Universidad de Campinas, en Brasil, podría abrir el camino que nos lleve a poder aprovechar la electricidad atmosférica como una fuente de energía alternativa en el futuro. De igual forma en que la energía solar doméstica puede ayudarnos a obtener electricidad extra sin tener que pagarla a la compañía eléctrica, esta nueva y prometedora fuente de energía podría tener un efecto similar.
La idea de utilizar la electricidad ambiental natural ha rondado por las mentes de los científicos durante siglos. El famoso inventor Nikola Tesla, por ejemplo, estuvo entre quienes soñaban con capturar y usar la electricidad del aire. Pero hasta ahora, a los científicos les ha faltado el conocimiento adecuado sobre los procesos involucrados en la formación y descarga de la electricidad por el agua en la atmósfera.
La creencia de que las gotas de agua suspendidas en la atmósfera son eléctricamente neutras, y permanecen así incluso después de entrar en contacto con las cargas eléctricas de las partículas de polvo y las gotas de otros líquidos, es errónea, a la luz de nuevas evidencias que sugieren que el agua en la atmósfera realmente adquiere una carga eléctrica.
Galembeck y sus colegas han confirmado esta idea mediante experimentos de laboratorio.
Han obtenido evidencias claras de que el agua en la atmósfera puede acumular carga eléctrica y que puede transferirla a otros materiales con los que entra en contacto. Galembeck y sus colaboradores llaman a este fenómeno 'higroelectricidad'.
En el futuro, es posible que se pueda lograr desarrollar colectores para capturar la higroelectricidad y dirigirla a viviendas y locales, de forma similar a lo que hacen las células solares, que recolectan la luz solar para producir electricidad. De igual modo que las células solares trabajan mejor en las áreas soleadas, los paneles higroeléctricos trabajarían más eficazmente en áreas con una alta humedad.
Con adaptaciones mínimas, estos exóticos dispositivos podrían servir también para ayudar a reducir la formación de relámpagos. Los rayos causan miles de muertes y lesiones en el mundo, y millones de dólares en daños materiales. La estrategia consistiría en colocar paneles higroeléctricos encima de los edificios, en regiones que experimentan frecuentes tormentas. Los paneles absorberían la electricidad del aire, y evitarían así la acumulación de carga eléctrica que da lugar a los relámpagos.
domingo, 3 de octubre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario