Con estas tres noticias que publicamos a continuación, intentamos reflejar el arduo trabajo que genera la incautación de materiales de contrabando por la AFIP a través la Administración Nacional De Aduanas, donde, y no es casualidad, en todas ellas se encuentran anteojos pregraduados y de sol, seguro causantes de problemas visuales, a veces muy serios, en aquellos que se arriesgan a comprarlos fuera de las ópticas (anteojos comprados en la calle y negocios no habilitados para tal fin).
Y ni hablar de infinidad de artículos, que sin ninguna garantía de fabricación según las normas legales, entrar al país de contrabando y se ofrecen al público en cualquier lugar.
Entre la mercadería incautada se encontraron 380.000 CD virgen; 172.800 DVD virgen; 32.400 pares de medias; 12.500 pares de anteojos de sol (CQC); 10.300 corpiños; 7.000 repasadores; 1.000 pares de zapatillas; 1.680 bombachas; 1.000 corbatas; 384 delantales de cocina; 288 conjuntos deportivos; 240 camisas; 230 planchas; 144 toallones; 1 TV LCD 32” y 1 TV LED 40” .
Operativo de AFIP en el Puerto
Se incautaron contenedores con telas y anteojos que en conjunto representaban 5 millones de dólares de evasión.
Al respecto comenta la óptica Eva Row en su blog la cosa y la causa
“El valor de los anteojos, en cambio, es inverosímil, sólo de 750 mil dólares. El valor exiguo de los anteojos y el daño que producen a la industria nacional son ambos igualmente categóricos.
Los anteojos se compran en China por peso en kilogramos, en bloques de descartados por fallas de fabricación, o baja de mostrario. Esos 750 mil dólares que le cuestan al importador, y que encima contrabandea, (un tipo con oficina rascándose el higo, que quede claro) se le transforman en diez veces esa suma, es decir 7 millones y medio de dólares, y aún así, valen la mitad del precio al que el fabricante argentino debe vender su producto. Menos de 2 dólares el anteojo y los vende en 20 dólares, cuando el fabricante argentino debe vender por lo menos a 40 dólares la pieza”.
Los anteojos se compran en China por peso en kilogramos, en bloques de descartados por fallas de fabricación, o baja de mostrario. Esos 750 mil dólares que le cuestan al importador, y que encima contrabandea, (un tipo con oficina rascándose el higo, que quede claro) se le transforman en diez veces esa suma, es decir 7 millones y medio de dólares, y aún así, valen la mitad del precio al que el fabricante argentino debe vender su producto. Menos de 2 dólares el anteojo y los vende en 20 dólares, cuando el fabricante argentino debe vender por lo menos a 40 dólares la pieza”.
El titular de la AFIP , Ricardo Echegaray, destacó que “el trabajo conjunto entre el Estado y el sector privado permite combatir la subfacturación y defender la industria nacional, los puestos de trabajo y la salud de la población”, durante un operativo que contó con la presencia de la directora general de Aduanas, Siomara Ayerán.
“Cuando encontramos importadores que eligen el camino incorrecto de subfacturar operaciones, de colocar menos kilos de los que realmente corresponden, y los controles funcionan se puede determinar este tipo de situaciones y llevar el peso de la ley”, aseguró el funcionario.
También participaron del operativo el presidente dela Fundación Pro Tejer, Pedro Bergaglio, y el presidente de la Cámara Argentina de Industrias Ópticas y Afines (CADIOA), Norberto Fermani.
“Cuando encontramos importadores que eligen el camino incorrecto de subfacturar operaciones, de colocar menos kilos de los que realmente corresponden, y los controles funcionan se puede determinar este tipo de situaciones y llevar el peso de la ley”, aseguró el funcionario.
También participaron del operativo el presidente de
En el marco de un ejercicio práctico de estudios de manifiesto y documentación aduanera realizado durante el “Seminario Internacional sobre lucha contra la Falsificación y Piratería”, se abrieron 5 contenedores provenientes de China con 48 toneladas de mercadería repartidas en 3.029 bultos. En el procedimiento se detectaron productos con marcas falsas, como maquinitas de afeitar Gillette, mochilas Nike y Adidas, y juguetes Barbie, Ben 10, Bakugan, Winnie the Pooh, Frutillitas, Hanna Montana y Campanita.
También se detectaron artículos de silicona y lentes pregraduados (con aumento) sin el correspondiente certificado emitido por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) y el Ministerio de Salud. Entre la mercadería había además pilas “botón” (alcalinas) sin el Certificado de Pilas expedido por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).
Espero que luego de leer esto, tomemos conciencia de lo peligroso que resulta para todos, el comprar anteojos en cualquier parte, debemos convencernos que el único lugar apropiado es la óptica.. Esteban Prego
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