Un hombre digno, un médico ilustre. Homenaje al Profesor Dr. Osvaldo Fustinoni
El reconocimiento de sus colegas y discípulos que trazan la semblanza una personalidad con múltiples y apasionantes facetas.
Semblanza del Dr. Osvaldo Fustinoni(por el Dr. Federico Pérgola)
Pese al “matrimonio” del que había hablado Snow en el siglo pasado entre las ciencias duras y las disciplinas blandas o humanísticas, la realidad actual revela el predominio de las primeras sobre las segundas. Sin embargo, el paciente añora a aquel médico clínico –no hablamos del superespecializado– capaz de conjugar ambas en beneficio del adecuado ejercicio de la medicina. Osvaldo Fustinoni había logrado ese equilibrio. Su capacidad médica, con los últimos adelantos de la disciplina, que se actualizaban aún cuando los años se contaban con muchas décadas, se unía con el conocimiento de las humanidades: historia, literatura, música, en fin, con toda inquietud que enjoyara el espíritu. Pero no solamente eso: contaba con la humildad de los grandes y una natural generosidad para todo aquel que se deseara perfeccionar en sus estudios. Nunca dejó de tender su mano al colega preso de la adversidad, además de su incondicional amistad se encontraba el interés porque se destacara, la ayuda para la obtención de becas o, también, la económica si se suscitaba. Quienes lo vimos marchar presuroso frente a la grave afección de un médico de planta –que resultó mortal– podemos dar fe de ello.
Quienes lo tuvimos como maestro dilecto, conocemos de su devoción por el conocimiento y su desinteresado afecto. Siguió fielmente las metas que se propusieron quienes estuvieron a cargo de la cátedra de semiología en la sala 4 del viejo Hospital de Clínicas –entre ellos Tiburcio Padilla y Pedro Cossio– y le tocó el traslado al Hospital de Clínicas “José de San Martín”, del que fue director. Con Alfredo Buzzi –con alto grado de gratitud– hemos dejado testimonio de su labor como hacedor en un pequeño libro donde destacamos su actividad en las Academias Nacionales de Medicina y de Ciencias de Buenos Aires, en la Sociedad Argentina de Gerontología y Geriatría, en la Sociedad Argentina de Nefrología, y como decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, además de su paso por otras varias instituciones, sus premios, sus condecoraciones y, sobre todo, de sus múltiples publicaciones.
Nunca levantó la voz para ordenar, siempre predicó con el ejemplo y la ecuanimidad de criterios. Su vida no fue inane.
Algunos comentarios de colegas y amigos.
Dr. René G. Favaloro (1923-2000). "Sentí verdadero respeto por la figura de Osvaldo Fustinoni. Fui notificado de que el premio que me otorgó La Prensa Médica se debió a su iniciativa y es lógico imaginar que mi nominación en la Academia Nacional de Medicina también llevó su firma.
Le agradeceré siempre todo el tiempo que me ha dedicado.
" Profesor José E. Burucúa (1918-1995): "Al profesor Fustinoni le pedí que me presentara el día de mi clase inaugural. El profesor Fustinoni ha sido para mí profesor, consejero y amigo. Fue él quien me impulsó a presentarme para ganar una beca en Francia, de la que mucho provecho obtuve y fue él quien me entusiasmó para ejercer la profesión en mi consultorio.
Si la beca contribuyó a formarme como médico, la decisión de atender en público me permitió realizarme como persona. Por ambos consejos reciba, usted profesor Fustinoni, la seguridad de todo mi agradecimiento. Si pensamos que la inteligencia es expresión de una actividad cerebral integrada, Osvaldo Fustinoni es el ejemplo más conspicuo que conozco.
"Dr. Félix Luna (historiador, 1925-2009): "Todavía me parece verlo llegar a mi casa en momentos difíciles, poniendo tranquilidad y orden allí donde reinaba el miedo y la incertidumbre. Creo que el doctor Fustinoni, en su larga vida, fue el paradigma del buen médico, aquel que no sólo alivia y cura sino que da esperanza.
Dr. Oscar Angel Helou: “Al profesor colega y amigo, le reconozco desde siempre su excepcional mirada científico-humanista en lo profesional. "
Sus pacientes fueron depositarios de sus mayores inquietudes y esfuerzos, su mirada fue siempre hacia ellos.
Era el médico por excelencia y a través de su sencillez y enorme sabiduría, su aporte quedará como un legado ejemplar permanente en el desarrollo de la medicina nacional.
Mi enorme agradecimiento a su bonhomía personal y a los ejemplos que brindó a través de una vida dedicada al bien común.
Profesor Miguel Falasco: "Su larga existencia estuvo dirigida permanentemente, sin claudicación alguna, a hacer el bien a sus pacientes, sin discriminación de clase social, política o religiosa. Cumplió a rajatabla principios éticos y reglas morales.
Su meta no fue el poder. Su honradez y su pureza se lo impedían. Interpretó cabalmente los principios hipocráticos del conocimiento científico dirigido a la protección de los demás. Toda su actividad la desplegó con amor a sus enfermos, colegas o discípulos.
Dr. Jorge P. Fellner:"Toda su existencia giró en torno del quehacer médico y universitario. Iluminó la cátedra y los claustros durante muchos años.
Tuve la suerte de pertenecer al "Instituto de Semiología" del Hospital de Clínicas que con acierto, tacto y disciplina Fustinoni heredó de sus mayores y lo acrecentó notablemente en todas sus riquezas intelectuales y científicas. En su vida demostró una falta completa de egoísmo.
Nunca pidió ni usufructuó de ninguna situación de privilegio personal. Dio a la Universidad de Buenos Aires sus mejores esfuerzos y sus definiciones clarificadoras en los momentos fundamentales, sin esperar nunca reconocimiento alguno por ello. Su espíritu va a rondar la Facultad de Medicina para siempre y su recuerdo permanecerá en nosotros eternamente."
"Mi padre Osvaldo Fustinoni" (1909-2000) del Dr. Juan Carlos Fustinoni". Lleva el prólogo de Magdalena Ruiz Guiñazú y de Guillermo Jaim Etcheverry. Tiene 448 páginas y 32 fotografías. Se presenta el Martes 10 de Agosto a las 18,30 en la Academia Nacional de Medicina (Avda. LAS HERAS 3092), oportunidad en que harán uso de la palabra el señor presidente de la Academia Nacional de Medicina, acad. Juan M. Ghirlanda, Magdalena Ruiz Guiñazú, Guillermo Jaim Etcheverry, Julio H. G. Olivera, Vicente Gutiérrez Maxwell y el Dr. Juan Carlos Fustinoni. Moderará el Dr. Nelson Castro.
El libro analiza la figura del profesor Osvaldo Fustinoni desde muy diversos ángulos y facetas: sus comienzos, el bachillerato, la Facultad, el casamiento con la poeta Marilina Rébora; su labor como médico, docente, investigador, hacedor de instituciones; sus reflexiones y opiniones; sus conferencias y publicaciones; Fustinoni humanista, académico y presidente de Academias Nacionales; el decanato de la Facultad de Medicina (1962-1966) y "la noche de los bastones largos"; sus numerosos premios nacionales e internacionales, diversas notas y sus últimos años.
domingo, 1 de agosto de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario