MACRI: LA AUTO INCINERACION DE LA ININTELIGENCIA (Dos plazas, un mismo sentimiento)

En este día de recuerdo aciago, Argentina ha vivido otra jornada de histórica reafirmación cívica.
Por los medios masivos de desinformación, se trató de polarizar la esperada afluencia masiva a las convocatorias de la Plaza de Mayo por un lado, donde se conmemoraba el golpe asesino del 76, organizado por Las Madres y por otra parte, el concierto en el escenario de la Plaza de la República, donde se presentaría el cantante español Plácido Domingo con la orquesta sinfónica, la soprano argentina Virginia Tol y el coro del Teatro Colón.

La esperanza era mostrar una multitud respaldando el evento del Gobierno de la Ciudad y les Salió el tiro por la culata.
La multitud que llegó temprano colmando la Avenida 9 de Julio (se estiman más de ciento cincuenta mil personas), esperó plácida (je) serena y respetuosamente aunque ansiosa, el comienzo casi puntual del concierto que seguidamente encantara a todos. No se observó entre el público ningún cántico ni bandera que permitiera suponer cualquier parcialidad, hasta que luego del intervalo, el locutor anunció el auspicio del Gobierno de la Ciudad al evento.
No cayó bien el anuncio… la silbatina y el abucheo fue tan generalizado y contundente, que sorprendió al presentador dejándolo atónito y mudo. Esto contrastó con las ovaciones que recibieron más tarde, el apoyo que Plácido Domingo dio a la orquesta y coro del Colón, a los que calificó como “columnas del teatro Colón” y el recuerdo de la fecha que hoy conmemoramos, cosa que reconcilió al público con el presentador.
Más temprano, la Plaza del 24 tuvo la afluencia desbordante de una sociedad reveladamente participativa, ave fénix del 2001. Este renacer deberá sin duda, ser motivo de estudio por las ciencias sociales y políticas en nuestro futuro próximo.  

Otro estudio que magnetizará a los profesionales, será el de este entusiasta pelotudo que hoy es jefe de gobierno. Dicho esto con todo respeto, claro, ya que no utilizo el término “pelotudo” como insulto, sino como descriptivo (popular si se quiere) de su personalidad.

¿Existirá otro ejemplo de perdedor consagrado de tal forma y a tal punto?
Se lo promovió como un “empresario exitoso” siendo que todo su mérito fue siempre ser “el hijo de”. Atizando la confusión que la gente tiene, cuando le dice “play-boy” a un triste y patético “paganini”. Más increíble aun, es cuando comprobamos que esa condición de “hijo de” está más próxima a Don Corleone, que a algún modelo de empresario.

Mauricio (el que es Macri, no diga que no se lo dijeron) ha desperdiciado nada más ni nada menos, la oportunidad que representa dirigir una de las siete principales capitales del mundo, cometiendo las necedades más incomprensibles; tanto, que no me es necesario enumerarlas, pues ya son archiconocidas.
Pero como frutilla de la torta está el concierto de hoy, que organizó para ser abucheado; es como si uno programara una fiesta, preparando todo para que nos echen de ella. Solo hizo algo atinado, no haber estado.
El elemento de sustentabilidad de un planeador, es la corriente térmica, así como el mecanismo de sustentabilidad de los siniestros e indolentes especuladores, es la corrupción; que si es sostenida a sangre y fuego, mejor. Y el fenómeno Macri en Argentina tuvo esa condición de proyección, que justamente hoy conmemoramos con dolor y emoción.

Enrique Juan Box.
DNI 10.603.903

Aclaración:
Discapacitado mental se es por condición, pelotudo se es por opción. Por esto y por respeto a las personas que nacieron con capacidades intelectuales diferentes, para describir la personalidad de algunos engendros humanos, utilizo este acertado y preciso término popular: pelotudo.