Antes de leer este artículo tenga bien presente que los anticoagulantes son medicamentos de innumerables riesgos para quien los ingiera y se consideran una respuesta inevitable como último paso en prevención, repetimos como ultimo recursos, hay muchos otros antes. Esteban Prego
Las personas con un ritmo cardiaco irregular deberían tomar anticoagulantes para reducir el riesgo de accidente cerebrovascular (ACV), recomienda una directiva actualizada de la Academia Americana de Neurología (American Academy of Neurology, AAN).
Tomar estos medicamentos es especialmente importante para las personas con un ritmo cardiaco irregular que ya han sufrido un ACV o un mini-ACV, afirman los expertos.
El ritmo cardiaco irregular (fibrilación auricular) es un factor de riesgo importante de ACV, porque provoca que la sangre permanezca en las cámaras superiores del corazón, según la AAN. La sangre puede formar entonces coágulos que pueden salir del corazón, llegar al cerebro y provocar un ACV. Aproximadamente el 5 por ciento de las personas con fibrilación auricular sin tratar son propensas a sufrir un ACV al año siguiente, indicó el grupo de expertos en neurología.
Los anticoagulantes son muy efectivos de cara a la prevención de los ACV, pero podrían causar hemorragias y deberían usarse solo bajo una atenta supervisión médica, según la directriz publicada el 25 de febrero en la revista Neurology.
Se han elaborado una serie de nuevos anticoagulantes desde que se publicara la última directriz de la AAN sobre el tema en 1998. Estos nuevos medicamentos, como dabigatrán (Pradaxa), rivaroxabán (Xarelto) y apixabán (Eliquis), son al menos tan efectivos o más que la warfarina, el medicamento establecido, y son menos propensos a provocar hemorragias en el cerebro, según la nueva directriz.
Además, los pacientes que toman los nuevos medicamentos no tienen que someterse a los frecuentes análisis sanguíneos requeridos para los que toman la warfarina.
La directriz también dice que los nuevos anticoagulantes podrían usarse en el caso de muchos pacientes con fibrilación auricular que normalmente quedaban excluidos, por tratarse de personas mayores, por sufrir una demencia leve o por tener un riesgo moderado de caídas.
"Por supuesto, los médicos necesitarán tener en consideración la situación individual del paciente al tomar una decisión sobre si usan anticoagulantes o no, y sobre cuál se debe usar, ya que los riesgos y los beneficios pueden variar para cada persona", señaló el autor principal de la directriz, el Dr. Antonio Culebras, de la Universidad Médica del Norte de SUNY, en Syracuse, en un comunicado de prensa de la AAN. Fuente: MedlinePlus
No hay comentarios:
Publicar un comentario