Algunos tipos de bacteria, como la que causa neumonía, pueden evadir las vacunas "disfrazándose", y por eso muchas inmunizaciones fracasan, revela una nueva investigación.
El estudio, publicado en Nature Genetics, siguió la forma como la bacteria del neumococo, Streptococcus pneumoniae, (que causa infecciones infantiles potencialmente letales, como neumonía y meningitis) respondió a la introducción de una vacuna en Estados Unidos en el 2000.
Se calcula que las infecciones de neumococo matan a cerca de un millón de niños menores de cinco años en el mundo cada año.
El éxito de los programas de vacunación, principalmente en los países desarrollados, ha provocado una reducción drástica en el número de casos.
Sin embargo, los científicos han observado que algunas de las vacunas se han vuelto menos exitosas con el paso del tiempo.
Ahora, por ejemplo, se utiliza ya una nueva versión de vacuna de neumococo.
Este tipo de vacunas funciona reconociendo a la bacteria por su recubrimiento -o cápsula-, un material formado de polisacáridos.
Lo que hace la inmunización es "entrenar" al sistema inmune para que ataque al foco de la infección.
Se conocen más de 90 tipos diferentes de esta bacteria y cada una utiliza una cápsula distinta.
Intercambio de cápsula
La vacuna de neumococo introducida en 2000 en Estados Unidos estaba diseñada para atacar a siete de los 90 tipos de bacteria.
Para 2007, afirman los investigadores, los casos de la infección se habían reducido rápidamente. Hasta ese año se vio una caída sostenida de 76% en el número de casos de septicemia, neumonía y meningitis en niños menores de cinco años.
Sin embargo, algunas cepas de la bacteria siguieron causando enfermedad.
"Hay muchas vacunas que se usan y parecen estables, y siguen funcionando porque atacan bacterias o virus que no cambian. El "Santo grial" de la medicina sería poder obtener una vacuna universal capaz de atacar un punto que es común en todos los tipos de neumococo."
Dr. Rory Bowden
Ahora el equipo de científicos de la Universidad de Oxford, Inglaterra y los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en Estados Unidos, descubrieron que la bacteria logró cambiar su cápsula de polisacáridos para evadirse de la vacuna.
La bacteria, afirman los científicos, cambió la región de su genoma encargada de producir su cápsula de polisacárados por la de un tipo de bacteria que no estaba siendo atacada por la vacuna, un proceso llamado intercambio de cápsula.
Con esto logró crear un disfraz efectivo y se hizo invisible ante la inmunización.
"Imagínese que cada cepa de bacteria de neumococo es un salón de clases con niños usando el uniforme del colegio" explica el doctor Rory Bowden, quien dirigió el estudio.
"Si un niño roba algo de la tienda de la esquina un policía -que en este caso es la vacuna- puede identificar fácilmente el colegio al que pertenece mirando su uniforme".
"Pero si el niño cambia su suéter con un amigo de otro colegio, el policía no podrá ya reconocerlo y el niño podrá escapar".
"Así es como la bacteria de neumococo evade la detección de la vacuna" agrega el científico.
Cuando los investigadores analizaron porciones de ADN de la bacteria de neumococo que había muerto, identificaron cinco casos de intercambio de cápsulas.
Los científicos notaron que una de las nuevas cepas, llamada P1, "rápidamente logró establecerse y propagarse de este a oeste en Estados Unidos".
"Se convirtió en una de las cepas más prevalentes de 2007" agregan.
La nueva vacuna actualizada que se utiliza ahora protege contra 13 tipos de bacteria.
Tal como explica a la BBC el doctor Bowden, "hay muchas vacunas que se usan y parecen estables, y siguen funcionando porque atacan bacterias o virus que no cambian".
El "Santo grial" de la medicina, agrega, sería poder obtener una vacuna universal capaz de atacar un punto que es común en todos los tipos de neumococo.
Tal como expresa el doctor Bernard Beall, de los CDC, "la actual estrategia de vacunas para atacar el serotipo predominante de neumococo es extremadamente efectivo".
"Sin embargo, nuestras observaciones indican que el organismo continuará adaptándose a esta estrategia con cierto éxito mensurable". Fuente: BBC Salud
martes, 7 de febrero de 2012
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3 comentarios:
Los pacientes con diabetes tienen un mayor riesgo de sufrir infecciones. De hecho, el padecer diabetes, duplica el riesgo de ingresar en un hospital por una infección y, cuando esto sucede, complica la evolución. Un factor protector importante frente a las infecciones es la actividad fagocitaria de las células mononucleadas de la sangre, habiéndose sugerido que en personas diabéticas está disminuida.
Aunque las bacterias evadan a las vacunas, es la forma de, ahora mismo, prevenir la neumonia.
Respecto a los pacientes con diabetes.
Si el tratamiento se realiza en base a conttrol de adrenalina y angiogénesis, hay muy pocas posibilidades de internación o posterior imputación.
Respecto a la infección, existe un métodos de contrl, inclusive está demostrado que hasta con pricipio de gangrna, se han recuperado lo miembros si necesidad de intervención quiúrgica alguna.
Intentaremos presentar al públcamente estos nuevos sistemae este año y formar la Escuela Média con este método lo más rapidamente posible.
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