“No comer fruta después de las comidas porque fermenta”, “debes comer la mitad de la manzana antes de las comidas para reducir la absorción de la grasa” o “la fruta se debe comer con el estómago vacío”, son sin las tres frases que mas escuchamos sobre la importancia de las frutas el contexto de una comida.A partir de lo que es realmente cierto. La fibra dietética tiene un papel potencialmente positivo en la reducción del nivel de la absorción de grasa. Sin embargo, no es absolutamente necesario la ingestión de una pieza de fruta antes de la comida de manera que esta interacción sea beneficiosa. De hecho, un plato de sopa tiene aproximadamente la misma cantidad de fibra que una pieza de fruta o más.
También las verduras cocidas o ensaladsa como acompañamiento al plato principal son excelentes proveedores de fibra y la presencia de la misma no hace que sea obligatorio la fruta como “entrada”. Incluso en este nivel, la ingesta de frutas en el final de una comida tiene dos ventajas potenciales: Por un lado, el contenido de vitamina C de muchas frutas tales como naranja, fresa o el kiwi que tiene un papel beneficioso en la facilitación de la absorción de la fuente de hierro presente en la comida vegetal (frijoles, pan, etc…). Desde otro punto de vista (más especulativa que es correcto), es el sensorial, la fruta puede tener más sentido al final de la comida para dar un carácter dulce en su epílogo, algo que muchas personas siempre buscan.
En cuanto a la ciencia ficción sobre la “fermentación” es otra hermosa historia que no es verdad. En efecto, el ácido clorhídrico presente en el ácido del estómago crean un medio de modo que difícilmente cualquier proceso de fermentación se pueda producir, simplemente porque las bacterias no pueden sobrevivir. Por cierto, uno de los muchos secretos del “éxito” de Helicobacter pylori (la famosa bacteria de las úlceras), es precisamente su capacidad para neutralizar la acidez de su hábitat en el estómago y por lo tanto colonizar más fácilmente.
Los gases que se pueden sentir después de comer fruta (al igual que las verduras, legumbres, granos enteros y otras fuentes de fibra) no es un signo de “rechazo” de nuestro cuerpo a estos alimentos, sino que estamos a comer la cantidad adecuada para tener un bueno funcionamiento intestinal. Por otra parte, esta es la misma fibra que tiene muchos beneficios para la salud como la mejora del tránsito intestinal, la reducción del colesterol y prevención de la diabetes de tipo II, enfermedad cardiovascular y el cáncer colorrectal.
Así, en lugar de preocuparse por lo que está bien en el momento de las comidas, nos debemos centrar en la consecución de las cinco porciones diarias de frutas y verduras ya que este si es el problema real. Si usted come grandes cantidades de sopa, frutas y algunas verduras en el plato ya alcanzado ese objetivo, el orden en el que se puede hacer!
En resumen:
- Antes, durante o después de una comida, coma la fruta cuando quiera.
- Aumente el consumo de fibra en la comida, ya sea a través de la sopas, ensaladas, verduras cocidas o frutas. Medical Press
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